Mi pequeño robo: “Cada vez que voy a una iglesia, pienso en ello”

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Un caramelo del supermercado, una moneda en la cartera de los padres, una baratija en una tienda... Casi todos, por no decir todos, los niños y adolescentes alguna vez han cometido algún pequeño hurto, ya sea por capricho o para presumir ante sus amigos. Nos pillen o no, estos pequeños robos suelen quedar grabados en nuestra memoria. En septiembre, un estanco de Uzès, en la región de Gard , recibió una carta de disculpas y 50 euros de un hombre que le había robado dulces cuando era niño... Libération ha recogido historias de pequeños robos. En este episodio, Loïc, de 31 años, jefe de proyecto en Saint-Etienne, recuerda su robo en el Vaticano, que lo persiguió durante mucho tiempo.

En la primavera de 2006, cursaba quinto grado en la región de Aviñón. Como estoy en la sección de latín, tengo derecho a...